A pesar de sus intentos por frenar su ejecución mediante denuncias de violaciones de la libertad religiosa e indiferencia a sus necesidades médicas, las autoridades de Texas harán cumplir este miércoles la pena de muerte a la que fue condenado Stephen Barbee, el hombre que asesinó a su exnovia embarazada y a su hijo de 7 años en su casa de Fort Worth, en 2005.
Barbee, según informa el Texas Tribune, fue condenado y sentenciado a muerte en el condado de Tarrant por matar a Lisa y Jayden Underwood, y esta es la tercera fecha de ejecución que enfrenta desde 2019. Durante el interrogatorio policial, Barbee confesó los asesinatos y dijo que temía que Underwood le dijera a su ex esposa que probablemente era el padre de su hijo por nacer y que tendría que pagar la manutención de los hijos. Poco después, se retractó de la confesión, que según su abogado fue “producto del miedo y la coerción”, y desde entonces ha mantenido su inocencia.
El año pasado, un juez federal concedió una suspensión a Barbee en base a su denuncia de que el Departamento de Justicia Criminal de Texas planeaba llevar a cabo su ejecución de una manera que violaría su derecho al libre ejercicio de sus creencias religiosas. Aunque la Corte Suprema de los EE. UU. confirmó los derechos religiosos de las personas que enfrentan la ejecución en Texas en su opinión en Ramirez v. Collier, la demanda de Barbee en la corte federal de distrito con respecto a sus solicitudes específicas relacionadas con su asesor espiritual aún está pendiente y es el foco del litigio actual, consigna Texas Tribune.
Ante la inminente ejecución de Barbee, la Coalición de Texas para Abolir la Pena de Muerte (TCADP, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado con fuertes críticas contra la Justicia y las autoridades del estado de Texas. “Esta noche, 16 de noviembre de 2022, el estado de Texas tiene programado ejecutar a Stephen Barbee a pesar de la violación de su derecho constitucional a un juicio justo que ocurrió cuando sus abogados admitieron inesperada e inadmisiblemente su culpabilidad ante el jurado a pesar de la insistencia de Barbee en su inocencia”, dice el inicio del mensaje de la ONG.
La Corte Suprema denegó una solicitud para suspender la ejecución de Barbee
De acuerdo a la información consignada por el Texas Tribune, los tribunales federales han ido y venido durante el último mes sobre la política de ejecución de Texas y los hallazgos de múltiples fallos de la Corte Suprema de EE. UU. que requieren que el estado permita que los asesores religiosos de los presos oren audiblemente y los toquen en sus momentos finales.
A principios de noviembre, el juez de distrito de EE. UU. Kenneth Hoyt emitió una orden judicial preliminar que establecía que Texas solo podría ejecutar a Barbee después de actualizar “una política clara” de acuerdo con el fallo de la Corte Suprema.
“TDCJ ahora está operando bajo una política no escrita en la que los funcionarios de la prisión pueden decidir unilateralmente si permiten la adaptación solicitada por un recluso … la adaptación puede retirarse a voluntad o capricho de cualquier funcionario de la prisión en el último momento”, se lee en el fallo de Hoyt citado por NY Post.
Los jueces federales de apelación anularon la decisión de Hoyt el viernes pasado por considerarla demasiado amplia. Posteriormente, Hoyt emitió un segundo fallo el martes, esta vez especificando que la opinión solo se aplicaba a Barbee.
Sin embargo este miércoles, pocas horas antes de que se cumpla el plazo para la ejecución de Barbee con una inyección letal, la Corte Suprema de los EE.UU. denegó la solicitud del convicto.
“La Corte Suprema de Estados Unidos ha denegado una solicitud para suspender la ejecución del condenado a muerte de Texas Stephen Barbee. La Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de EE. UU. también anuló una orden judicial en el caso. La ejecución de Barbee está programada para hoy después de las 6 pm CST en Huntsville”, informó vía Twitter Juan Lozano, periodista de The Associated Press.
Barbee recibirá una inyección letal el mismo día que Arizona ejecutó a Murray Hooper por el asesinato de dos personas
Murray Hooper, de 76 años, murió por inyección letal en la prisión estatal de Florence por sus condenas por asesinato en los asesinatos de William “Pat” Redmond y su suegra, Helen Phelps, en la casa de Redmond en Phoenix. La esposa de Redmond, Marilyn, también recibió un disparo en la cabeza durante el ataque, pero sobrevivió y testificó contra Hooper en su juicio.
La muerte de Hooper fue anunciada por Frank Strada, subdirector del Departamento de Correcciones, Rehabilitación y Reingreso de Arizona, según reporta The Associated Press (AP).
Según informó vía Twitter Jimmy Jenkins, periodista de policiales para AZ Central, las últimas palabras de Hooper fueron:”Todo está dicho, que se haga. No estés triste por mí. No llores. Te veré más tarde, vámonos”.
Desde la TCADP advirtieron en el ya citado comunicado que Barbee es una de las cuatro personas en cuatro estados diferentes que enfrentan ejecución entre hoy y mañana, y la última persona que se enfrenta a la ejecución en Texas este año. No obstante, ya se han fijado numerosas fechas para 2023.
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