Un fuerte terremoto de magnitud 7,4 sacudió 2 de abril a la costa central oriental de Taiwán, a unos 20 kilómetros al sur de la ciudad de Hualien.
Los lugareños cercanos al epicentro describieron sacudidas del suelo entre intensas y violentas durante el seísmo, lo bastante fuertes como para que resultara difícil permanecer de pie o conducir un vehículo. Al parecer, se sintió en todo el país, así como en la vecina China.
¿Qué sabemos hasta ahora del seísmo y cuáles pueden ser sus consecuencias?
Muertes y daños
Los medios de comunicación han informado de que al menos cuatro personas han muerto y decenas han resultado heridas como consecuencia del seísmo.
Aunque gran parte de la población de Taiwán vive en la costa occidental del país, la ciudad de Hualien es uno de los mayores núcleos de población de la costa oriental, con aproximadamente 100 000 habitantes.
Se han registrado daños en edificios en la región cercana al epicentro del seísmo, incluida la ciudad de Hualien. También se produjeron corrimientos de tierra a lo largo de la montañosa costa este central.
Se emitió una alerta de tsunami para Taiwán y los países cercanos, incluidos Japón y Filipinas. En el momento de escribir estas líneas, se había registrado un tsunami de 30 centímetros a lo largo de la costa sur de Japón. Aunque se manifestó como un oleaje perceptible en la costa, es poco probable que cause daños significativos.
No obstante, la mayor marejada de un tsunami no siempre es la primera, por lo que es posible que se produzca una ola de tsunami mayor. La buena noticia es que, a medida que pasa el tiempo, resulta cada vez menos probable.
¿Hubo algún aviso?
Aunque los terremotos no se pueden predecir, Taiwán cuenta con un sistema de alerta temprana. Este sistema detecta las sacudidas del suelo cuando se producen en la región epicentral y envía inmediatamente una alerta que viaja más rápido que la energía sísmica y las sacudidas del suelo asociadas.
Probablemente, este sistema proporcionó segundos cruciales de advertencia para que los que vivían lejos del epicentro se pusieran a cubierto.
¿Qué tipo de terremoto fue?
De momento, las estimaciones sugieren que la ruptura del terremoto comenzó entre 10 y 40 kilómetros bajo la superficie terrestre.
Un seísmo a menor profundidad suele producir sacudidas más fuertes que un seísmo a mayor profundidad, por lo que es más probable que provoque daños en los edificios cercanos.
Los últimos análisis de los datos de este terremoto sugieren que el seísmo se situó en el extremo menos profundo de este intervalo y que, probablemente, produjo una ruptura que rompió la superficie. Los datos de la superficie terrestre obtenidos por satélite nos darán más información sobre la deformación del suelo en los próximos días.
La ruptura del terremoto se produjo en una falla inversa. En estos casos, el seísmo levanta un lado de la corteza terrestre con respecto al otro, lo que puede producir un desplazamiento vertical del fondo oceánico y generar un tsunami.
Aproximadamente tres horas después del seísmo inicial, ya se han producido 13 réplicas de magnitud superior a 5.0, todas suficientes para producir sus propias sacudidas en gran parte del país. Estas fuertes réplicas pueden provocar el derrumbamiento de edificios que sólo sufrieron daños en la sacudida principal.
Historial de seísmos en la zona
La región de Hualien ya ha experimentado terremotos con anterioridad.
En febrero de 2018, en esta región se produjo un terremoto de magnitud 6.4, que tristemente causó 17 muertos. Aquel terremoto fue el evento principal de una secuencia de eventos sísmicos a principios de 2018, incluido un premonitor de magnitud 6.1, es decir, un terremoto de menor magnitud que precede, en cuestión de días o semanas, al principal. No sabemos que un terremoto es un premonitor hasta que se produce el principal.
Según mi análisis de los datos sísmicos disponibles, la región de Hualien experimenta terremotos de magnitud superior a 7 aproximadamente una vez cada 30 años.
El mayor seísmo registrado recientemente en la costa de Taiwán fue el terremoto de Chi-Chi, de magnitud 7.6, que se produjo en 1999. Más de 2 400 personas perdieron la vida como consecuencia de este seísmo.
Es probable que el seísmo de magnitud 7.4 de hoy siga produciendo réplicas durante días y semanas. Y desde luego, no podemos descartar la posibilidad de que ni siquiera haya sido el mayor evento de esta secuencia, es decir, que sea un premonitor. No obstante, a medida que pasa el tiempo disminuye la probabilidad de que se produzca un terremoto asociado de mayor magnitud.
Para obtener información actualizada, recomiendo consultar la Administración Meteorológica Central de Taiwán, que informa sobre las réplicas y las alertas de tsunami a medida que recibe más información.
Por Dee Nini, Earthquake Scientist, Monash University
Este artículo se vuelve a publicar de The Conversation bajo una licencia Creative Commons. Lea el artículo original.