Joe Biden eligió a la senadora Kamala Harris como su compañera de fórmula en las elecciones presidenciales de noviembre. Ahora, muchos están interesados en conocer la postura de Harris sobre los controles de estímulo, una posición sobre la que ha hablado mucho en los últimos meses. La propuesta de estímulo de Harris enviaría pagos mensuales a millones de estadounidenses e incluso proporcionaría un pago retroactivo por cada mes de la pandemia que se remonta a marzo.
La pregunta de muchos es ¿cuándo es lo más temprano que pudieran comenzar estos pagos?
Es poco probable que comience un plan de pago mensual pronto, a menos que Harris y Biden asciendan al poder, y a menos que el Senado también adopte una mayoría demócrata. Ambos eventos ocurrirían en noviembre, cuando se den las elecciones.
Mientras tanto, el Congreso no ha podido llegar a ningún tipo de compromiso con respecto a otro paquete de alivio y cheques de estímulo. Aunque los legisladores demócratas y republicanos se reunieron durante varios días de negociaciones sobre la Ley HEALS en julio, esas conversaciones finalmente se interrumpieron y se estancaron. Esto significa que es poco probable que alguien reciba un cheque de estímulo antes de septiembre como mínimo, y que es posible que no se produzca una segunda ronda de pagos durante el fin del primer mandato de Trump.
Se podría pensar en que los eventuales cheques de ayuda pudieran empezar a recibirse en diciembre de 2020 o en el año nuevo.
Para millones de estadounidenses, un cheque único de $1,200 ni siquiera cubriría el alquiler mensual. Se estima que 28 millones de personas están al borde de perder sus hogares.
La Ley de Apoyo Mensual a la Crisis Económica, introducida por Harris y otros dos senadores en mayo pasado, enviaría cheques de $2,000 mensuales a individuos y $4,000 a parejas casadas que presenten declaración de impuestos conjuntamente, junto con $2,000 adicionales por cada hijo, hasta tres hijos. Cualquier individuo que gane menos de $120,000 sería elegible. Los pagos se reducirían por ingresos superiores a $100,000 para individuos o $200,000 para parejas casadas. Los pagos se eliminarían gradualmente en un 10% de cualquier monto que supere estos límites.
Es muy posible que el plan de estímulo de Harris sea aprobado por el Congreso y se convierta en una realidad a fines de este año o principios de 2021, dependiendo de algunos factores clave.
Primero, Harris y Biden tendrían que ganar la presidencia en noviembre y asumir el cargo en enero. En segundo lugar, el Senado tendría que inclinarse hacia una mayoría azul, de lo contrario sería prácticamente imposible aprobar un plan tan importante de cheques de estímulo, dada la resistencia del actual Senado, controlado por los republicanos, a aprobar cualquier plan de cheques de estímulo.
Por último, el estatus de la pandemia dentro de unos meses jugaría un factor importante. El apoyo a los pagos mensuales en diciembre o enero se vería afectado en gran medida por el estado actual del virus (si las empresas y las escuelas han podido reabrir y permanecer abiertas, por ejemplo), así como el estado actual de la economía del país y la tasa de desempleo.
También es posible que Harris deje de presionar por su propuesta de cheques de estímulo, ahora que ha sido nombrada vicepresidenta en la lista demócrata. Aunque fue muy elocuente sobre la necesidad de un apoyo fiscal mensual para los estadounidenses en los meses previos al anuncio, no ha dicho nada sobre los cheques de estímulo desde que fue elegida. Esto podría ser una indicación de que no priorizará los pagos de estímulo como plataforma en los próximos meses.
Biden aún no ha dado su apoyo público al plan de estímulo de Harris.
Aunque Biden ha seleccionado a Harris como su compañera de fórmula para las elecciones, aún no ha hablado mucho sobre dónde se alinea con ella, en cuanto a políticas. No ha entrado en los detalles de ninguna de las posturas de Harris, y mucho menos en su postura sobre un cheque de estímulo mensual durante la pandemia.
El propio Biden tampoco ha hecho prácticamente ningún comentario público sobre los controles de estímulo. Su sitio web oficial indica que haría lo siguiente para remediar la crisis inducida por la pandemia en Estados Unidos:
-Proporcionar otro cheque de estímulo “si las condiciones lo requieren”.
-Perdonar $10,000 por persona en préstamos estudiantiles federales, como mínimo.
-Aumentar los cheques mensuales del Seguro Social en $200 cada uno.
-Ofrecer licencia por enfermedad pagada de emergencia a todos los trabajadores estadounidenses.
-Asegúrarse de que nadie tenga que pagar de su bolsillo por las pruebas del COVID-19, el tratamiento o cualquier vacuna relevante en el futuro.
-Proporcionar “todo el alivio fiscal necesario”.
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