Han sido muchas las personalidades del mundo del cine, la televisión, la música y el deporte que han perdido la vida a causa del coronavirus. Y esta vez a la larga lista de muertes, que en Estados Unidos ya casi raya en los 50,000, se suma ahora la de un querido defensor de la comunidad inmigrante: “El Brody”.
Mario Hernández, más conocido como “El Brody”, quien era llamado así por su afición al fútbol, deporte que jugaba con ropa al estilo del portero mexicano Jorge Campos (conocido originalmente como Brody), falleció en un centro médico de Nueva Jersey, tras contagiarse del COVID-19.
La noticia fue revelada por el periódico El Diario de Nueva York, donde se aseguró que el reconocido defensor de los inmigrantes, murió a la edad de 59 años.
El deceso del mexicano se registró el pasado 10 de abril, luego de permanecer internado durante una semana, con un deterioro paulatino de su salud.
El Brody había nacido en Atlixco, Puebla, y desde 1990 vivía en la localidad de Dover, Nueva Jersey, junto a su esposa y sus hijas: Anahí, María y Xóchitl.
Con el paso del tiempo el Brody comenzó a hacerse famoso entre sus vecinos y en el estado jardín por tenderle la mano principalmente a los inmigrantes recién llegados.
“Era trabajador de mantenimiento en una lavandería y en una tienda de abarrotes de Dover, además de voluntario en la liga local de futbol donde juegan sus nietos y donde era entrenador de un equipo infantil”, aseguró el diario neoyorquino. “Quienes lo conocieron lo recuerdan como un hombre trabajador, bondadoso, romántico, humilde, apasionado por el futbol y siempre dispuesto a ayudar a los demás”.
“Cuando mi familia y yo nos mudamos por primera vez a Nueva Jersey, era Don Mario quien nos llevaba todos los días a la escuela y se aseguraba que llegáramos con bien porque no teníamos transporte”, dijo en Facebook Cinthia Degante, quien lamentó la muerte del activista. “Él fue parte de mi infancia y me entristece escuchar esto”.
Xóchitl, la hija del fallecido luchador pro-inmigrante recordó también a su padre con mucha tristeza.
“Mi papa nunca les preguntaba su nombre, solo les decía: ‘déjame ayudarte’. Si veía a alguien que parecía tener miedo de preguntar, les decía: ‘si necesitas algo dime, y si puedo ayudarte, te ayudaré’”, dijo la joven, quien agregó que están realizando una recolección de fondos en el sitio GoFundMe para los gastos funerarios.