Nick Cordero, el actor ganador del premio Tony, quien protagonizó las obras Waitress y Rock of Ages de Broadway, así como la serie de televisión Blue Bloods, ha estado en cuidados intensivos durante los últimos 18 días, debido a complicaciones causadas tras contagiarse por el coronavirus, y está viviendo una situación bastante dramática.
La noticia fue revelada por la esposa de Cordero, Amanda Kloots, quien es bailarína y entrenadora físico, y madre de su hijo de 10 meses, Elvis Eduardo. La mujer ha mantenido a sus amigos, familiares y fanáticos actualizados sobre la salud del actor durante su larga batalla contra el COVID-19, y las noticias cada vez son más dolorosas.
Este sábado, Kloots explicó que debido a un tratamiento que estaban utilizando para salvarle la vida al actor, hubo complicaciones con su coagulación, por lo que debieron amputarle una pierna.
“Recibimos algunas noticias difíciles ayer”, reveló la señora de Cordero, describiendo cómo los médicos estaban tratando al actor con anticoagulantes para ayudar a aliviar la coagulación en la pierna derecha de Cordero, pero que los anticoagulantes ahora estaban causando problemas con su presión arterial, lo que podría provocar problemas de sangrado en sus intestinos. “Le quitamos los anticoagulantes, pero eso nuevamente causó la coagulación en la pierna derecha. Entonces la pierna derecha será amputada hoy (ayer fue la cirugía)”.
Cordero ha estado sufriendo problemas de flujo sanguíneo en su pierna derecha durante las últimas semanas. Kloots describió previamente el problema y dijo: “Recibimos una llamada telefónica diciendo que una de las cánulas para el ECMO estaba deteniendo el flujo de sangre a su pierna derecha y tuvieron que someterse a una cirugía inmediata para salvar el flujo de sangre a su pierna”.
El 11 de abril, Kloots dijo a través de Instagram que su situación pasó de estable a peor después de que Cordero necesitaba ser resucitado en medio de la noche. Luego, los médicos pusieron a Cordero en una máquina ECMO, que ayuda a “apoyar su corazón y sus pulmones”.
Después de que parecía que Cordero estaba progresando, Kloots recibió otra actualización sombría de los médicos. “Recibí una llamada telefónica que decía que tenía una infección en el pulmón, una nueva infección, que hizo que su fiebre aumentara mucho más de lo normal, lo que provocó que su presión arterial bajara, lo que hizo que su corazón entrara en [un] patrón irregular. Perdió el conocimiento, perdió el pulso y tuvieron que resucitarlo. Fue muy aterrador. Les costó mucho recuperarlo”, dijo.
El jueves, Kloots mencionó que las complicaciones en su pierna continuaron mientras Cordero permanecía en cuidados intensivos. Ella dijo que había una posibilidad de que “nunca podrá volver a caminar”, debido a los “problemas de flujo sanguíneo” en su pierna.
Al principio, los médicos creían que Cordero tenía neumonía después de que dio negativo en COVID-19 dos veces. Sin embargo, el 6 de abril, una tercera prueba confirmó que sus síntomas provenían del nuevo coronavirus, después de lo cual su salud se deterioró rápidamente. Cordero, quien había mudado a su familia a Los Ángeles para actuar en el espectáculo musical Rock of Ages, permanece en cuidados intensivos en Cedars Sinai.
El 12 de abril, Kloots dijo: “Recibí una llamada telefónica a las 2:30 de la mañana, necesitaban mi consentimiento para someterlo a diálisis para ayudarlo con sus riñones. Ahora está en un ventilador, diálisis y esta máquina ECMO. Estábamos esperando nuevamente y esta tarde recibimos una llamada telefónica de que las cosas realmente se estaban moviendo en la dirección correcta y que su vida se estaba salvando, lo cual fue enorme”.
Y para tratar de darle buena energía a su esposo, todos los días, Kloots comienza una fiesta de baile en línea a las 3 p.m. PT con la música de Cordero llamada “¡Despierta, Nick!”. El espíritu positivo y la alegría incesante de Kloots por la salud de su esposo se han convertido en un evento mundial. Los usuarios en línea de LA a Nueva York y Corea compartieron videos en Instagram con el hashtag “Wake up, Nick!” que luego publica en su propia historia cada día.
El sábado, Kloots mantuvo su ánimo en alto, y dijo que esperaba que la amputación de la pierna de su esposo sería ya lo último y peor antes de que comience a ver su recuperación.
Debido al coronavirus, no puede sentarse al lado de su esposo en el hospital, lo que ha sido comprensiblemente devastador. Ella escribió en Instagram: “Solo desearía poder verlo. Tomar su mano. ¡Tocar su cara, creo que esto ayudaría a despertarlo!”, dijo.
