Al igual que en parto de Milan, el equipo que la atendió en la clínica de Barcelona estuvo formado por un grupo exclusivamente de mujeres salvo el cirujano plástico que se encargó de que la cicatriz de la operación quede lo menos visible que se pueda. A las médicas y matronas que participaron se les pidió firmar un acuerdo de confidencialidad, reportó Jornada. (Instagram)