Este miércoles se produjo la primera reunión entre Jorge Messi, padre y agente de Lionel, y la Junta Directiva del FC Barcelona. El argentino viajó especialmente desde Rosario para reunirse con Josep Maria Bartomeu, presidente del club Blaugrana.
La reunión no fue lo que el entorno de Messi esperaba. El club se puso firme en su postura. El club que pretenda al atacante argentino deberá pagar 700 millones de euros, tal cual lo indica la cláusula de rescisión.
La intransigencia de Bartomeu obliga a Messi a recurrir a los tribunales de la FIFA para conseguir la libertad de acción. Jorge, su padre, sabe que de apelar a la vía legal la salida de su hijo sería un episodio desafortunado, un injusto final para el mejor futbolista de la historia del club.
El rosarino estaría evaluando continuar en el club catalán. Claro que esa no era su intención. De hecho, ya había iniciado gestiones con el entrenador de Manchester City, Pep Guardiola. Pero el anhelo de mudarse a Inglaterra y jugar en la Premier League podría postergarse por un año más.
El primero en lanzar la bomba fue el periodista argentino Martín Arévalo. Sus declaraciones en el programa “Presión Alta”, TyC Sports, circulan este jueves en todas las portadas de los sitios de noticias de España.
Arévalo es un periodista allegado a la familia Messi. Durante una década realizó la cobertura del seleccionado argentino para distintas radios y canales de televisión de su país. Viajó y convivió con el entorno del futbolista en tres Copas del Mundo.
De acuerdo al diario Sport, esta información es fidedigna. De hecho, Messi está evaluando cuáles son sus pasos a seguir. Se estima que el rosarino podría incorporarse a los entrenamientos comandados por el holandés Ronald Koeman la próxima semana.
Messi se ausentó a la primera semana del ciclo del holandés como DT Culé. Bartomeu le informó a su padre que el Barcelona no hará uso del derecho que le corresponde para multar al futbolista por incumplimiento de sus obligaciones laborales. La familia del astro entiende que los directivos han acorralado al 10, lo han puesto entre la espada y la pared: si se quiere marchar, debe hacerlos por las bravas.
Ante este nuevo contexto, una idea que empieza a tomar fuerza en el círculo del argentino es respetar el contrato con la institución española. Seguir en el club hasta junio de 2021 y despedirse de la afición dentro del campo de juego. Habrá novedades en las próximas horas.
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