Serbia vive horas de conmoción tras confirmarse la muerte de una de sus mejores atletas, la especialista en tiro Bobana Velickovic. Falleció este domingo a los 30 años por complicaciones en el parto de su primer hijo.
La joven atleta se encontraba internada desde hacía veinte días. La última semana de vida la pasó en estado de inconsciencia. La prensa serbia confirmó un dato estremecedor: nunca llegó a verle la cara a su hijo. Afortunadamente, el recién nacido se encuentra en buen estado de salud.
Velickovic, tal como se dijo, era una de las deportistas de mayor prestigio en su país. Integraba el equipo nacional de tiro desde hacía una década. El pasado 27 de febrero, antes del estallido de la pandemia del coronavirus, se subió al podio por última vez. Fue en la ciudad polaca de Breslavia. Allí obtuvo la medalla dorada en la especialidad pistola de aire comprimido de 10 metros. En esa competición hizo sonar dos veces el himno de su país: días más tarde se coronó con su equipo.
Por actuaciones como esta, la joven Bobana era considerada una referente en la disciplina de tiro a nivel europeo.
Velickovic nació el 25 de enero de 1990 en la ciudad de Bor, ciudad ubicada 20 kilómetros al oeste de la frontera con Bulgaria. Se inició en el tiro cuando apenas tenía 9 años. Sus destacadas participaciones en las categorías junior y cadete la llevaron a participar en campeonatos continentales.
Su primer éxito fuera de Serbia se dio en el año 2007. En la ciudad francesa de Deauville se celebró el Torneo Europeo Junior. Bobana se colgaría la medalla de bronce. Esta actuación le deparó una beca por parte del gobierno de su país. Desde entonces se dedicó de lleno a la actividad deportiva.
En el año 2010 le llegó la temprana consagración. Hizo su debut en el Campeonato Europeo celebrado en la ciudad noruega de Meraker. Pese a su nula experiencia, se proclamó campeona. Repetiría la medalla dorada dos años más tarde, en el Campeonato Europeo Vieruekiu 2012.
Su rico historial deportivo se coronó con las participaciones en los Juegos Olímpicos Londres 2012 y Río de Janeiro 2016. En ninguna de estas competiciones consiguió subirse al podio. Lejos estuvo de pelear por una medalla.
Especialmente en los Juegos disputados en Brasil, su participación resultó una de las sorpresas de la especialidad. La prensa especializada catalogó de ‘decepcionante’ el hecho de que no haya conseguido colgarse ninguna medalla.
